Para muchas personas de distintas edades es sinónimo de diversión y alegrías, para otros sinónimo de terror y de los miedos mas profundos y paralizantes. A esto se lo conoce como coulrofobia, es la fobia o miedo irracional a los payasos, el mayor porcentaje de afectados son niños, pero puede aparecer en adolescentes y adultos.
Esta fobia a los payasos esta en muy estrecha relación con aquellas causas emocionales latentes en el subconsciente del sujeto ( es decir no percibidos conscientemente por el individuo, pero que pueden aflorar en determinadas situaciones e influir en su manera de actuar o en su carácter).
Aquellas personas que experimentan este miedo irracional refieren haber vivenciado personalmente algo negativo en torno a la figura de un payaso.
Existe un gran consenso entre los profesionales de la salud mental en que una de las principales causas de la coulrofobia se debe a las características del maquillaje que emplean los payasos, esas mascaras con colores vivos y expresiones exageradas, donde toman el verdadero rostro de la persona ocultando todo aspecto físicos; se puede decir que son estímulos terroríficos para la mente de un niño, y pueden llegar a causarle miedo, del mismo modo en que algunos pequeños también temen sentarse en el regazo de Santa Claus.
Las personas con fobias a los payasos, con frecuencia se presenta el miedo y este miedo le impide realizar cierto tipos de actividades, no pueden intentar evitar las situaciones en que se les presenta ese miedo irracional, tan así que les impide desarrollar su vida cotidiana de forma natural.

Algunos de los síntomas son: miedo intenso, temblores, ansiedad, taquicardia y sensación de latido irregular, dificultad para respirar, sudoración, llantos, etc.
El tratamiento mas habitual para esta fobia es la terapia psicológica, que mediante la preparación, permite a las personas con fobia tomar contacto progresivamente con la causa del miedo, de modo que esas maléficas sensaciones van disminuyendo de forma progresiva.