Días difíciles si los hay en la Republica Argentina, estando al borde de una economía o planteándomelo como desde el desprendimiento de un hilo, como también de a poco se desprende todas las consecuencias que llevan al comportamiento de quienes pasan por una situación similar, y no solo desde la mirada del trabajador sino también desde su familia como (esposa/o, hijos, etc.)
Lo primero que notamos en cambios materiales son los ingresos, y esto lleva a modificar los estilos de vida, los cuales vienen a colación consecuencias psicológicas negativas como lo son en lo que conocemos como autoestima, depresión, ansiedad, etc.
Desempleo no solo quiere decir no pertenezco mas a tal sector, sino que de la mano viene crisis, discusiones, aislamiento social ya ferro a una burbuja denominada (YO), donde se hace impenetrable cualquier palabra, ya que la persona se comienza a sentir inseguro y desvalorizado. Estos efectos del desempleo pueden llevar a una familia a convivir con otra familia en situaciones precarias, económicas y sociales donde el trabajador/a se encuentra desanimado/a, y vivencias de discriminación de ciertos grupos.

El empleo es una de las principales fuentes de vida, ya que a partir de esto damos raíces a otras tantas en nuestra vida y en las de otros, el trabajo en muchos casos aporta un granito para la personalidad y un sentido en su máxima expresión denominado identidad, frente a este dolor la propuesta de asertividad es poder acercarse a la terapia psicológica, ya que con esta herramienta la persona no se va a encontrar tan vulnerable frente a esta situación, queda claro que frente a esta situación cada individuo puede tomarlo de diferentes formas y esto dependerá de la personalidad de cada uno. Nombraré algunos de los sentimientos por lo que se puede llegar a pasar frente a este dilema:

• Vergüenza,
• Sentimientos de inferioridad,
• Sentimientos de fracasos,
• Sentimientos de culpa.